Microsoft ha anunciado a través de su blog, que será posible desactivar el Internet Explorer en el nuevo sistema operativo, Windows 7, que esperan lanzar a finales de este año. Esta opción será posible gracias a la herramienta "Windows Features", que permitirá desactivar aplicaciones como Internet Explorer, Windows Media Player o Windows Media Center.
De esta forma las aplicaciones desactivadas no se cargaran en memoria al arrancar el equipo, por lo que será como si no estuvieran instaladas. Imaginad un Windows sin Internet Explorer. Parece que este podría ser el punto y final del conflicto que Microsoft mantenía abierto con la Comisión Europea, que ya en el año 2004 acusó a la compañía de abusar de su posición dominante en el sector, al incorporar sistemáticamente a Windows su navegador.
Los que seguro estarán de celebraciones serán el resto de navegadores, que como Firefox, Opera y el reciente Chrome luchan por hacerse un hueco. Por cierto, que ya he leído que Google está preparando otra beta de su navegador.
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